El equipo de voleibol de la Universidad Gerardo Barrios (UGB) vivió recientemente un emocionante partido amistoso frente al Instituto Nacional de San Simón. Este encuentro no solo fue una oportunidad para mostrar las habilidades deportivas de la selección de voleibol UGB, sino también para fomentar el aprendizaje y la convivencia en un ambiente de respeto y camaradería. Más allá de la competencia, el amistoso se centró en fortalecer la confianza y poner en práctica los valores aprendidos en los entrenamientos, demostrando que el deporte es una herramienta poderosa para el crecimiento personal y académico.
Los objetivos de este partido iban más allá del marcador final. La selección de voleibol UGB buscaba promover actitudes positivas, como el respeto y el trabajo en equipo, además de mejorar la confianza en cada jugador. Para muchos de los estudiantes, el partido representaba un reto emocionante, y, aunque algunos sintieron nervios iniciales, el equipo técnico los motivó a enfocarse en aplicar lo aprendido durante sus prácticas. La actividad física, en especial el voleibol, contribuye no solo al bienestar físico, sino que también ayuda a reducir el estrés, mejorar las habilidades intelectuales y fortalecer la autoestima. La experiencia de este partido brindó a los estudiantes una vía para socializar y demostrar sus talentos en la cancha.
Aunque el resultado no fue favorable para la selección de voleibol UGB, los estudiantes se llevaron aprendizajes valiosos. Rafael Calvo, uno de los jugadores del equipo, compartió su perspectiva: “La experiencia fue amarga por la derrota, pero sabemos que a veces se gana y a veces se pierde. Lo importante es valorar lo bueno, corregir los errores, y seguir adelante”. Este tipo de reflexiones resalta cómo el deporte les enseña a manejar los altibajos, a levantarse después de cada caída y a seguir mejorando constantemente. La derrota fue una lección para el equipo sobre la importancia de perseverar y trabajar en las áreas que necesitan reforzar, convirtiendo cada experiencia en un escalón hacia su desarrollo deportivo.
El partido amistoso entre la UGB y el Instituto Nacional de San Simón fue una experiencia enriquecedora que resaltó el compromiso y la dedicación de cada uno de los jugadores. Este tipo de actividades deportivas refuerzan no solo las habilidades físicas y mentales, sino también la capacidad de los estudiantes para enfrentar retos tanto dentro como fuera de la cancha. La selección de voleibol UGB demostró que el verdadero espíritu deportivo se encuentra en la voluntad de aprender y en el compañerismo, valores que seguirán impulsándolos a crecer juntos en cada paso del camino.